El yoga es una técnica milenaria practicada desde la época Védica (1800 – 1000 a.C) o incluso anterior a ella. YOGA significa UNIÓN de nuestro cuerpo, mente y emoción.
En la antigüedad, se trataba de una disciplina más orientada al ámbito del conocimiento interno y la conexión espiritual, relacionada con la religión, hoy en día es un método practicado en todo el mundo mediante la realización de técnicas físicas, respiratorias y de meditación.
Hay muchos tipos de yoga, las corrientes más conocidas sería el Raja Yoga (más orientado al cultivo de la mente) y el Hatha Yoga (más dedicado a la práctica corporal) entre otros. De estas dos corrientes nacieron otros muchos estilos diversos de yoga.
En FISIOYOGA utilizamos una mezcla del Hatha Yoga, el Iyengar Yoga y el Vinyasa Yoga principalmente para hacer de esta disciplina un método más completo y funcional, adaptado a tus necesidades, patologías y evolución. Su base fundamental es el MOVIMIENTO CONSCIENTE, haciéndote de esta forma partícipe de tu evolución para que puedas ir conociendo el funcionamiento de tu cuerpo y logrando un estado de BIENESTAR a corto y largo plazo.

¿Cuáles son sus beneficios?
– Mejora de la postura, buscando una alineación corporal eficaz y correcta y aliviando muchos de nuestros dolores provocados por desequilibrio entre grupos musculares.
– Nos ayuda a gestionar nuestras emociones, relacionadas con ciertos grupos musculares y nuestros gestos y por tanto, las posturas que realizamos.
– Controla el estrés y la ansiedad, mediante la técnica de posturas conscientes y la meditación, te ayuda a bajar el cortisol y enfrentar mejor situaciones socialmente estresantes.
– Mejora el sueño, la meditación trae consigo una mejora de los síntomas del insomnio, la depresión y la fatiga.
– Te enseña a respirar, el aprendizaje de diferentes técnicas de respiración así como la meditación te hace consciente de tu respiración y puede aliviar ciertos síntomas en personas con asma.
– Disminuye el dolor, la práctica del yoga mediante sus posturas física y la buena activación del “Core” junto con el trabajo de respiración y meditación, te ayuda a aliviar tu dolor, sobre todo en patologías de nuestra columna lumbar baja.
– Mejora nuestras cualidades físicas con la práctica de posturas que profundizan en la evolución de nuestra flexibilidad, resistencia, fuerza, equilibrio y coordinación.
– Mejora tu concentración y memoria, no solo la práctica de meditación sino la realización del yoga de forma consciente te trae beneficios a la hora de desarrollar cualidades cognitivas.